Quiero no hacer nada y no sentirme mal por ello. Quiero dejar que el tiempo pase sin mirar el reloj o el móvil, no tener que seguir el ritmo que marca mi agenda y despreocuparme de contestar emails al momento. En definitiva, desconectar.
DESCONECTAR Y CONECTAR.
Conectar con mi ritmo biológico y el de mis hijas, conectar con los sentidos y disfrutar de ellos. Disfrutar sin prisas de una caña y unas pipas con mi chico, pequeños momentos absurdos que tanto nos llenan.
Mar, brisa, sol, siesta, risas… estar y sentir.
Hasta pronto,
V.