Intento mantener mis buenos hábitos todos los días del año, aunque en épocas de mucho trabajo o en vacaciones, con nuevos horarios, se desordena mi rutina. Ahora, estando embarazada, estoy mucho más atenta a mi descanso y alimentación para que el bebé crezca sano y fuerte.
Procuro ser consciente de la cantidad de vitaminas, minerales, proteínas, carbohidratos y buenas grasas que tomo a lo largo del día. Es mi forma de conseguir el equilibrio entre todas las comidas, que es, para mí, la clave de una buena alimentación.
Hoy me gustaría hablaros de las proteínas, tan importantes para hombres como para mujeres. Ingerir suficientes al día nos beneficia, entre otras cosas, en algo tan importante como mantener una buena masa muscular. Encuentro importantísimo envejecer con un buen tono y fortaleza física: mantener una buena musculatura a través del hacer ejercicio y una buena alimentación es la clave. Además que esto nos ayuda a frenar la flacidez, ¡qué tan poco nos gusta a las mujeres!
No puedo olvidarme de lo importante que es ingerir suficientes proteínas durante el proceso de gestación por el que estoy pasando, para el buen crecimiento del bebé y para que mi cuerpo se mantenga sano. Como dice mi ginecóloga, “el bebé solo se nutrirá de lo que necesite, si no lo ingieres lo sacará de tu organismo”. Por eso estoy tan atenta a lo que como y evito todo lo que puedo las calorías vacías. En mi alimentación, las proteínas están presentes a través de las de procedencia animal, como los pescados, huevos, carnes y lácteos; y las de procedencia vegetal, como las legumbres, verduras y frutos secos.
Por el calor y por la necesidad de comer más cantidad, pero de forma más fraccionada durante el día, he acoplado snacks con una base de gran proteína como es la del yogur. Un producto ligero, fresco y muy apetecible para el verano. Te propongo una merienda súper fácil de preparar a la que estoy recurriendo mucho estas vacaciones: un yogur acompañado de fruta fresca, por ejemplo papaya, y frutos secos. Un snack riquísimo. Yummy!